Inspiración en colores

Este es el segundo cuadro abstracto que hice este fin de semana. Específicamente el sábado, creo que es el día de mayor inspiración.

Escuchando a Imogen, artista favorita de mi bubumchi, comencé colocando cuatro colores en el centro de mi lienzo. Los elegidos fueron: el lila, el azul, el rojo y el verde limón.

La primera pincelada fue para el rojo hacia la arriba a la derecha, luego el verde hacia arriba a la izquierda, azul hacia abajo derecha y el lila hacia abajo izquierda y con eso comenzó una serie de divagues, particularmente intentando separar la mitad y dirigiendo el pincel siempre en círculos.

La idea central era saber hasta que punto se mezclan los colores, sin mezclar tampoco todos ellos, sino de una manera que represente "algo"

Las líneas completaron las vueltas y caminos del cuadro, de la imagen, de los colores...de la vida.

Primera obra, primer escrito

Comenzamos...

En un momento de inspiración, el sábado agarré el pincel y empecé con los garabatos.

Estuve estudiando pintura en un lugar pero no me sentía satisfecha con lo terminado, no puedo juzgar a la profesora ni al método de enseñanza, pero creo que el problema soy yo... antes de que empiece ya quiero llegar al final.

Hay veces que pienso que termine justo a tiempo la facu, porque cuando me pongo a pensar en mis últimos años, me doy cuenta que estaba al borde de un ataque de nervios por no dar las materias que realmente yo queria, que realmente me ayuden a poder liberar esa creatividad que siento venir siempre hasta la punta de las manos o la lengua, pero que no puedo sacar y experimentar.

Ahora con el arte y la pintura me pasó lo mismo, cuando comenzé ya quería pintar algo que a mi verdaderamente me parezca increíble y comenzé por cosas que nada tenían que ver con algo increíble.

No digo, ni pienso que esta primera obra abstracta sea increíble, pero por lo menos veo más encaminado el arte que fluye de mis manos. Sobre todo porque aunque empezé pintando otra cosa en este mismo cuadro, el resultado final me dio a entender que estaba pensando en la posibilidad que uno tiene a diario, de las opciones que uno va eligiendo porque hay muchos caminos por tomar, muchas formas de tomar algo. No siempre es color de rosa, porque todo es una mezcla de colores y de sensaciones. Y no siempre es cuadrado, ni es redondo. Simplemente es. Y esa escencia es la que no debe cambiar.